LUNA NUEVA DE JUNIO
en la playa de Almeria
Recostado en tu arena fresca
de un atardecer ultra celeste
veo el barco que me llevaba a Nador
años ha
Boquerones
ajoblanco
trigo
arroz a banda
gazpacho
Oh cocina mediterránea andaluza
te saludo vehemente
pues tu me has curado una vez más
En lo simple
encuentro lo que busco
aqui y en la orilla catalana
por unas horas y dias
antes de regresar al sur lejano
Sabores intensos
y
geografías diversas
me iluminan
la piel y el alma
la piel y el alma
A pocos metros del mar antiguo
los mismos paisajes de la orilla mora
se aperciben en esta orilla cristiana
Toda la actitud ante la vida breve
ante la vida intensa y simple
plasmada en el sagrado paseo del atardecer
a orillas del mar
de cientos
de miles de vecinos
que en Almeria y Alhucemas
y en otros tantas playas y ciudades equivalentes
del norte y del sur
del mar nuestro
salen a pasear
para conversar
para mirarse
para encontrarse
para comer pescaito
con la misma pasión
con igual sabiduría
antigua
El rumor de las conversaciones
se iguala
con el sonido de las olas del mar
A distancia de pocos metros
de las olas
incluso las lenguas del norte
de gentes rubias
aquí se amalgaman
en un producto sonoro humano
Distinto del canto de las golondrinas
que revolotean a centímetros de mi cabeza
en el alfeizar de la Alcazaba
Diferente de todo otro sonido
estas conversaciones humanas a orillas del mar
me recuerdan las viejas escuelas helenas
que sobre la arena mojada de las playas orientales
creaban figuras geométricas universales
rodeados por decenas de estudiantes
los sabios maestros de occidente y de oriente
No se si volveré a vivir en tus orillas
amigo mediterráneo
mar de mis tormentas
Por eso apuro las horas
mirandote en la madrugada solitaria
y al anochecer
me regalo escuchando las voces
de las gentes
que te moran
felices
a pesar de todo
Igor Parra
en Arqueología del Futuro Antiguo