TE HE VISTO
estas últimas semanas
en caras de otras personas jóvenes
Cada día por las esquinas de entonces
que existen intactas aún
paso raudo hacia lo cotidiano
Camino sobre las sombras
de los gritos del tumulto
de nuestras consignas
No son fantasmas lejanos
ni próximos
porque las calles y sus esquinas
están ahí
aún
Y a veces te veo
en caras parecidas a la tuya
Sabemos que moriste
callado
sin delatar
Lo sabemos porque cuando me capturan a mi
no sabían nada de nosotros
ni de nuestra célula institutana
gracias a tí
aún
querido camarada Pedro
Ni siquiera supe entonces tu nombre
Fueron las fotos de nuestros desaparecidos
las que me enseñaron tu nombre verdadero
Y ese es el rostro que a veces veo en Santiago
aún
En personas de tu misma edad
al momento de morir
callado
sin romperte
en el tormento
a tus brillantes diez y nueve años
aún
Mauricio
Diez y nueve años
aún
Qué me quieres decir ahora?
Tantas veces nos cruzamos durante años
en los patios y en las Asambleas institutanas
y más de una en las marchas
y en las peleas callejeras de entonces
Fue en San Martín esquina Huérfanos
año setenta y tres del siglo pasado
Nos concentramos ahí en ese viejo palacio
cientos de jóvenes guevaristas
entrada la tarde un día de combates duros
del mes de abril
Estómagos vacíos
hambre física
Me pediste un racimo de uvas recién compradas
Fue nuestro único alimento hasta la noche
Porqué Mauricio ahora te apareces
en esas calles
en esas esquinas
aún?
Cuál es el mensaje?
A quién debo transmitirlo?
Quizás
aquí en estas líneas?
Quizás
porque no debemos olvidarte
aún
querido compañero?
Igor Parra