sábado, 20 de junio de 2015

cambio de estado

A LAS SEIS DE LA TARDE

próximo el solsticio

ayer diecinueve de junio

cambié de estado

Así como el vapor de agua precipita

Y tal como el mar se puede congelar

o se evapora hacia el azul aéreo

ayer cambié sutilmente

No he variado mi vestimenta

de paleontólogo urbanita

Tampoco mi casa-librería

abandono

No trastoco mi optimismo 

ni viajo de una orilla política a la otra

Ni siquiera me corto el pelo

Incluso

sigo pensando como en la vieja Sefarad

que la perfección es sólo privilegio del 

innombrable

que en su Tetragrama es El

Cambio de estado en los papeles

de esta República extrema

extraña

desfondada por la corrupción

alerta a la pasión de la juventud movilizada

en acción

Cambio de estado

porque ayer me alcé del lecho soltero

y anoche me acosté casado

matrimoniado

entusiasmado

optimamente optimista

-ya lo escribí supra

y lo repito-

Y mientras sea así

mientras sigan las gentes

cambiando de estado

habrá vida concernida

habrán problemas encarnados

habrá tierra habitada

Porque al cambiar de estado

se mueve el alma con alegría

que es el humus necesario

para pensar bien

y actuar mejor

Brindo pues

por todos los que han cambiado

y cambiarán

sus vidas

como las moléculas de agua

pasando de un estado disgregado

a otro contínuo

fluido

que sacia la sed inagotable

del alma enamorada

Igor Parra