sábado, 19 de mayo de 2012

 PERICLES

hijo de Xanthippos

leo tu oración fúnebre

dos mil cuatroscientos treinta y un años 

después 

de proclamada  al aire puro de Atenas

La leo 

 con deleite 

La leo 

y la vuelvo a leer

desde hace treinta y seis años

en el libro

de mi maestro

 Tucídides

Te he leido en griego antiguo

Duro ejercicio escolar

Te he leido en casi todas las lenguas latinas

y germánicas

En todas resurges

 brillante  y magnífico

Tu pensamiento aristocrático y democrático ateniense

lo hice mio 

hace cuatro décadas

Qué me importa si me llamaron elitista

cuando eres y serás siempre mi sólido fundamento?

La belleza  de tus palabras 

sólo fue igualada por tu hechos

En horas de extrema alegría

o de zozobra

volver a ti siempre me enseña

la sobriedad

necesaria

la profundidad y el equilibrio

del alma 

antes y después de la acción

Tu eres ejemplo olvidado de hombre completo

Te rememoro como amigo próximo

y

consejero eficiente

No te conocí personalmente

pero repito en griego antiguo

musito respetuoso

cada una de tus frases

Desde este siglo veintiuno de la era cristiana

llegando al extremo del occidente geográfico

ahora

al inicio de mi última vida

brindo por ti

viejo amigo

padre intelectual 

poderoso héroe del occidente todo

temporal y terrestre

Tu hálito heroico me embarga de emoción

Tu ejemplo me alumbró 

desde casi niño

Te descubrí en la guerra

Te estudié siempre

entre pasiones del espíritu

y de la alegre carne

Te saludo

amigo Pericles

Si hay otra vida

me anima

y alegra

 pensar

que al cruzar la laguna Estigia

te encontraré 

Y

 de ti seguir aprendiendo

hasta el fin del tiempo

quiero

Cruce de la laguna Estigia de Patinir
Voy al Museo del Prado 4 décadas ad mirandolo


Igor Parra

extractos de In Memoriam