jueves, 9 de enero de 2014

CUARTO EJERCICIO PARA AUSENCIA

DE AIRE ESTAS DAGAS

las afilo con tu halito

Las humedezco con nuestra saliva

y corto con ellas el silencio

de nuestra noche

la más oscura en tu ausencia

la más luminosa

cuando tu mano me busca

y me encuentras

dormido

Pero siempre alerta

junto a ti

para protegerte

de las noches viejas

de tus noches ausentes

de otros tiempos

que te visitan a veces en sueños

Y contra ellas

mi mandoble de silencios

mis manojos 

de inhalaciones 

que deshacen

tus sombras acechantes

y nos resguardan 

para las albas

que ya se anuncian

intensas

justo sobre el perfil

de tu cadera


Igor Parra

Ejercicios Para Ausencia