TRIZ:
Tieoriya Riesheniya Izobrietatielskij Zadach
Igor Parra
En la librería newyorkina de la calle 57 casi esquina de la 6 Avenida tuve uno de los encuentros más importantes de mi vida adulta. En una estantería próxima a la sección de ciencias encontré el libro fundamental de G. Altshuller. Desde ese invernal día frío del año 1995 me he esforzado en aprender, aplicar y desarrollar TRIZ, es decir la Teoría para Resolver Problemas de Inventiva ("Tieoriya Riesheniya Izobrietatielskij Zadach"). En este link, http://es.wikipedia.org/wiki/TRIZ, encontrarán algunos datos someros de quién fue su creador, sus trabajos para la Armada soviética y alguna descripción muy sintética de la compleja y siempre innovadora Teoría TRIZ .
No aparece, sin embargo, en ese link, referencias a la persecución política que sufrió por parte del regimen comunista soviético, y la forma sorprendente cómo G Altshuller logró sobrevivir aplicando en su celda, entre interrogatorio e interrogatorio, los principios de su entonces incipiente Teoría TRIZ.
Creo que me compré todo lo que habia en Nueva York de Altshuller ese año, y los dos siguientes; al comenzar a leer los diferentes textos, me dí cuenta que algo importante estaba pasando en mi vida intelectual. Comencé a aplicar los principios más generales de TRIZ a todo problema ya profesional o más general que se me cruzaba en el camino. Porque la teoría TRIZ, en su práctica habitual, desemboca en un método TRIZ , que fue el que me orientó de forma exitosa en la elaboración de las ideas principales de varios programas europeos de investigación paleoclimática, a cuya redacción fui invitado por universidades italianas y francesas a partir de mi tesis doctoral.
Altshuller analizó al menos doscientas mil patentes para establecer algunas generalidades prácticas del proceso inventivo que las había alumbrado en el cerebro de cada ingeniero o inventor. Y llegó a la conclusión que había una Teoría porque había una constante profunda en cada una de las tan disimiles patentes de todo tipo que él estudió. Se debe destacar, esto para mi fue muy importante, que Altshuller era, él mismo, el autor de miles de patentes, algunas de las cuales fueron utilizadas para resolver problemas relacionados con el armamento, transporte, comunicaciones, minería y navegación.
TRIZ saca a la superficie del problema no sólo una definición de ingeniería para un caso problemático cualquiera, la famosa Matriz de Altshuller (http://triz40.com), sino que plantea familias de soluciones inventivas, que a veces son extremadamente simples, directas y que implican pura innovación a partir de los datos conocidos.
Desde mi punto de vista, de practicante de TRIZ durante los últimos 15 años, esta Teoría y los métodos que se derivan de ella equivalen a la sinapsis, pero no a la velocidad de la luz de ésta, sino a la velocidad que permite la superación de las contradicciones principales que cada problema plantea al ingeniero o al investigador. Este es el centro teórico del universo TRIZ descubierto por Altshuller, sistematizado por él. Es decir es una Teoría que ayuda, primero a identificar sistemáticamente las contradicciones principales del problema planteado, y luego, a partir de la inmensa casuistica acumulada durante su larga vida, definir familias de soluciones en las que de forma caracteristica se relacionan variables cuantitativas y cualitativas que a primera vista no resultan obvias.
En la web hay un periodico electrónico de fácil acceso y tambien en línea se puede comenzar a practicar el uso de la Matriz de contradicciones.
De esta manera sistemática y no de forma puramente intuitiva TRIZ-ALtshuller, y toda su escuela de pensamiento y acción, aproxima al estudioso y practicante a soluciones innovadoras muchas veces impensables cuando el problema a resolver es atacado de forma”desordenada”.
Incluso, tengo la impresión que TRIZ también sirve en el campo del análisis y la acción estratégica tanto civil como militar; varios ejemplos de ello se han plasmado en este blog, por ejemplo al emitir mi juicio sobre el futuro inmediato de las Cajas de Ahorro estaba aplicando principios TRIZ a un problema contingente. Las familias de soluciones que un caso de ese tipo genera se reduce, con la ayuda de algunas nociones de biología evolutiva a plantear los escenarios que nos atrevimos a formular entonces, y que el tiempo no ha desmentido. Lo mismo puedo decir del tema marroquí o de la forma cómo he afrontado, en el plano social y político, el desarrollo progresivo del conflicto de contaminación nuclear de la zona de Palomares, en el sur de España, en mi papel de dirigente ecologista. La experiencia y la casuistica nutren el análisis de la realidad, pero TRIZ la sistematiza en familias de contradicciones principales y encausa, yo diría que incluso potencia, la innovación de soluciones inéditas en el campo no sólo de la ingeniería de sistemas, sino también de la política, de la guerra e incluso, rizando el rizo, del amor apasionado, que no es más, in fine, que una manifestación de la vida vivida intensamente, donde Altshuller y su escuela han aportado grandemente a humanizar, socializando, el desarollo tecnológico, pues identifica y entrega herramientas para solucionar los problemas más complejos de forma, aparentemente, simple. Todo un logro de la evolución de la inteligencia humana.
Por ello TRIZ debiera ser una asignatura obligatoria en todos los Bachilleratos y en casi todas las carreras universitarias.